フランス人はなぜマクロン体制よりも「過激な極右」を選んだのか

2024年 7月 1日 11:56
ホームワールドニュース
フランス人はなぜマクロン体制よりも「過激な極右」を選んだのか

過信していた大統領は、国政選挙の第1ラウンドで大敗を喫し、自業自得だった

レイチェル・マースデン（コラムニスト、政治戦略家、フランス語と英語で独自に制作するトークショーの司会者）。

写真上：ファイル写真。 2024年6月28日、ブリュッセルのEU本部で開催された欧州理事会首脳会議の終了後、記者会見するフランスのエマニュエル・マクロン大統領。 © Ludovic MARIN / AFPBB News

エマニュエル・マクロン仏大統領は、先月の欧州議会選挙で自チームを打ち負かした反体制右派に手榴弾を投げつけようと考えた、とルモンド紙が報じた。 フランスの有権者がブリュッセルのユーロクラッツを牽制するためにマリーヌ・ルペンの国民結集党を支持したとしても、国政選挙ではいわゆる「極右」を間近で見ると怖すぎると感じるに違いないと考えたようだ。

そのためマクロンは、政治史上最も愚かな失策のひとつとして語り継がれるかもしれない事態を引き起こした。

5月に行われたイプソスの調査によれば、フランス人の39％がEUレベルでの投票を、マクロンにお仕置きをしたいという切なる願望だけを通して見ていたにもかかわらず、彼は議会を解散し、もう一度やるように啖呵を切った。 彼は本当にお尻を叩くのが好きなのだろうか？ そうでなければ、ラスベガスの賭けテーブルには近づかないほうがいい。 というのも、フランス人は彼の手榴弾を両手でつかみ、それを使って彼のベレー帽を吹き飛ばしたからだ。  

チーム・マクロンは今回、2回の投票のうちの1回目で2位にもなれなかった。 反体制派の両党に次いで、予想20％の第3位だった。 今回も大勝したのはルペンの反体制右派政党「国民結集」で約33％、反体制左派政党「新人民戦線」連合は推定28％で2位だった。

エラベの世論調査分析によれば、反体制派は577議席の国民議会で260議席から310議席を確保し、過半数政権に必要な289議席を満たす可能性があるという。

マクロン体制派が一掃され、反体制派の右派と左派が残った今、政治カードは7月7日（日）の第2回投票に向けてシャッフルされつつある。

マクロン大統領は、この敗北の賭けによって、大統領職の最後の3年間を、立法的に漂流する船長として、最終的にどのような乗組員となるにせよ、常に戦い続けることを事実上保証されたようなものだ。 そして、右派と左派の反体制的な政治的分裂の両側はそれを祝福している。

左派の連立党首ジャン＝リュック・メランションは、「この投票は、大統領とその候補者、そしていわゆる大統領の多数派にとって、重く否定できない敗北をもたらした」と述べた。 しかしその後、最終ラウンドに向けて現在3位を走っている同党の候補者たちに対し、国民集会が勝利する可能性があるのであれば、たとえ第2ラウンドに進むための得票基準（登録有権者の12.5％）を満たしていたとしても、脱落するよう呼びかけた。

これは、チーム・メランションが事実上、マクロン派の既成候補を支持することを意味する。 これが左派の論理だ： 私たちが体制派を打ち負かしたのは素晴らしいことですが、反体制派のライバルよりも体制派に投票してください。  

その論理がお好きなら、もし彼らが政権を取ったら、それを経済学にどう応用するかを見ていてほしい。 2プラス2イコール...誰が本当に気にするんだ？

曲がったグローバリストの体制が葬り去られたとはいえ、その影響力の亡霊は、この最終投票に向かうフランスの政界に取り付いている。 彼らはヒントをなかなか受け取らない。

すでにマクロン自身とガブリエル・アタル首相を含むチーム・マクロンが、フランスの有権者に対し、鼻をつまんで左派に投票しなければならないとしても、第2ラウンドで国民集会の対立候補を選ぶよう要求している。

「今夜の教訓は、極右が権力の瀬戸際にいるということだ......我々の民主主義において、今晩ほど国民議会が極右に支配される危険にさらされたことはない」とアッタルは結果が出る間際に語った。 「もし私たちがフランスの運命に生きたいのであれば、最悪の事態を防ぐために可能な限りのことをするのが私たちの道義的義務です」と彼は付け加えた。

この人たちは、自分たちや自分たちの体制派の仲間たちが本当の過激派だと思われていて、だから国民が発言権を得るたびに民主的に否決され続けているのだ、ということに思い至らなかったのだろうか？

彼らは有権者が愚かで、本当の脅威を見てもわからないと思っているような口ぶりだ。 しかし、有権者が明確に伝え続けているのは、この数カ月で2回目の投票となったが、すでに存亡の危機と戦っているということであり、それは体制側が作り出したどんな想像上の脅威よりもひどいものであり、チーム・マクロンにはその責任があるということだ。

フランス国民は、ウクライナへの支出や、戦場でウクライナが勝利するという幻想の下での国内的な「景気対策」から、ウクライナでロシアと戦うフランス軍について考えることまで、すべてにおいて過激で極端に誤った優先順位の結果、もはや生きていくのがやっとだ。 しかし、その後、戦地にいるふりをする必要すらない兵士たちが、デッドリフトや腕立て伏せをするために、より多くの軍隊を通勤させることになるとしたら......。 マクロンは "戦略的曖昧さ"の種をまきたがっているのだから。 普通の人が言うところの「陰険さ」だ。

マクロン大統領のクラッシュ・アンド・バーンは、出口ランプがいくつもある長い滑走路の恩恵を享受していないわけではない。 2018年11月、マクロンが自動車燃料の炭素税を再び引き上げることを決定したことで始まったフランスのイエロー・ベスト・デモは、コヴィッドの封鎖まで数カ月間続いたが、フランス人が自分たちの生活能力を犠牲にしてまでイデオロギー的な無意味なことにお金を払う気はないことを示す最初の手がかりとなるはずだった。 しかし、その後、彼と彼のエリート主義的なユーロクラットの仲間たちは、ますます息苦しい気候変動コストと、フランス人が皿に盛る食べ物の価格と入手可能性を台無しにする規制に固執した。 何も過激なことはないだろう？

民主主義を主張する割には、チーム・マクロンは49条3項の憲法条項を使って不人気な法律を強引に成立させた。 そして今、マクロンが野党を極端だと決めつけることにフランス人が抵抗しなくなったのは大きな謎だ。 そして、フランスの有権者が、購買力、世界におけるフランスの認識と並んで、今回の選挙の争点上位3つのうちの1つであると考えている、ますます極端になっている移民と不安の状況について、彼は何をしたのだろうか？ 明らかに不十分だ。  

だから今、彼は左派にキスを吹きかけ、有権者を自分たち自身から、そして彼らが望んでいると彼に言い続けていることから救う最後の希望のように扱っている。 彼が今フランスの有権者に何を命じようとも、彼らはただ喜んで盲目的に従うだろう。 これまで2度、フランスの有権者はマクロンの選挙での要求に耳を傾け、彼にそれを突き放すように言った。 しかし、3度目の正直だろうか？

本コラムに記載された発言、見解、意見はあくまで筆者のものであり、必ずしもRTのものではありません。

スペイン語訳：
1 Jul, 2024 11:56
HomeNoticias del mundo
Por qué los franceses eligieron a la "extrema derecha radical" frente al establishment de Macron

El presidente, demasiado confiado, recibió lo que se merecía cuando su partido sufrió una derrota masiva en la primera vuelta de las elecciones nacionales

Rachel Marsden
Por Rachel Marsden, columnista, estratega política y presentadora de programas de entrevistas de producción independiente en francés e inglés.
rachelmarsden.com

Foto superior: FOTO ARCHIVO. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, habla con la prensa al término de la Cumbre del Consejo Europeo en la sede de la UE en Bruselas el 28 de junio de 2024. © Ludovic MARIN / AFP

El presidente francés, Emmanuel Macron, imaginó que lanzaría una granada a la derecha antisistema que derrotó a su equipo en las elecciones parlamentarias europeas del mes pasado, como informó Le Monde. Al parecer, pensó que, aunque los votantes franceses favorecieran al partido de Marine Le Pen, la Agrupación Nacional, para mantener a raya a los eurócratas de Bruselas, seguramente seguirían encontrando a la llamada "extrema derecha" demasiado temible de cerca en unas elecciones nacionales.

Así que Macron provocó lo que podría pasar a la historia como uno de los errores no forzados más tontos de la historia política.

A pesar de que una encuesta de Ipsos realizada en mayo indicaba que el 39% de los franceses veían su voto a nivel de la UE únicamente a través del prisma de un ardiente deseo de azotar a Macron, éste disolvió el parlamento y les retó a hacerlo de nuevo. ¿Quizá le gustan mucho los azotes? O bien se trata de un tipo que probablemente debería mantenerse alejado de las mesas de apuestas de Las Vegas. Porque los franceses han cogido su granada con las dos manos y le han volado la boina del peluquín.  

El equipo Macron ni siquiera ha quedado segundo esta vez, en la primera de las dos rondas de votación. Quedó tercero, con un 20% previsto, por detrás de los dos partidos antisistema. El gran ganador, una vez más, fue el partido de derechas antisistema de Le Pen, la Agrupación Nacional, con cerca del 33%, y la coalición de izquierdas antisistema Nuevo Frente Popular quedó en segundo lugar, con un 28% estimado.

La tan vilipendiada "extrema derecha" anti-establishment no sólo acaba de ganar esta ronda de votaciones, sino que ahora incluso se habla de que podría asegurarse entre 260 y 310 escaños en la Asamblea Nacional de 577 escaños, lo que podría alcanzar los 289 escaños necesarios para un gobierno de mayoría, según un análisis de sondeo de Elabe.

Así que ahora que el partido de Macron ha sido purgado, dejando a la derecha y a la izquierda antisistema, las cartas políticas se barajan de nuevo para una segunda vuelta el domingo 7 de julio, que determinará el verdadero corazón ideológico y el alma de Francia.

Con esta apuesta perdedora, Macron se ha garantizado prácticamente los tres últimos años de su presidencia como capitán a la deriva legislativa, luchando constantemente contra cualquier tripulación con la que finalmente acabe en el gobierno. Y ambos lados de la división política anti-establishment a derecha e izquierda lo están celebrando.

"Esta votación ha infligido una dura e innegable derrota al presidente, a sus candidatos y a la llamada mayoría presidencial", declaró el líder de la coalición de izquierdas, Jean-Luc Melenchon. Pero a continuación hizo un llamamiento a los candidatos de su partido, que actualmente marchan en tercer lugar en la última vuelta, para que abandonen si la Agrupación Nacional tiene alguna posibilidad de ganar, aunque alcancen el umbral de votos (12,5% de los electores inscritos) para pasar a la segunda vuelta.

Esto significaría que el Equipo Melenchon estaría apoyando de hecho a los candidatos del establishment macronista. Esa es la lógica de la izquierda: Es increíble que hayamos derrotado al establishment, pero por favor, votadle ahora en vez de a nuestro rival anti-establishment.  

Si te gusta esa lógica, observa cómo la aplican a la economía si alguna vez llegan al poder. Dos más dos es igual... a quién le importa, porque de todos modos son ustedes los que pagan por ello.

Y aunque el corrupto establishment globalista acaba de ser enterrado, su espectro de influencia sigue rondando el panorama político francés de cara a esta votación final. No entienden muy bien las indirectas.

Ya estamos viendo al Equipo Macron, incluido el propio Macron y el primer ministro Gabriel Attal, exigiendo que los votantes franceses elijan a los oponentes de la Agrupación Nacional en la segunda ronda, incluso si tienen que taparse la nariz y votar a la izquierda, aparentemente.

"La lección de esta noche es que la extrema derecha está al borde del poder... Nunca en nuestra democracia la Asamblea Nacional ha corrido tanto riesgo de ser dominada por la extrema derecha como esta noche", dijo Attal mientras llegaban los resultados. "Ni un solo voto debe ir a la Agrupación Nacional... Si queremos estar a la altura del destino francés, es nuestro deber moral hacer todo lo posible para evitar que ocurra lo peor", añadió.

¿No se les ha ocurrido pensar que ellos y sus amigos del establishment son los verdaderos extremistas, y que por eso siguen siendo rechazados democráticamente cada vez que el pueblo se pronuncia?

Hablan como si pensaran que los votantes son estúpidos y no reconocen una amenaza real cuando la ven. Pero lo que los votantes siguen transmitiendo claramente, en una segunda votación en otros tantos meses, es que ya están luchando contra amenazas existenciales, que son peores que cualquier amenaza imaginaria conjurada por el establishment, y que el equipo Macron es responsable de ello.

Los ciudadanos franceses apenas pueden permitirse seguir viviendo como resultado de las prioridades radicales y extremadamente equivocadas en todo, desde el gasto en Ucrania y las medidas internas "economicidas" bajo la ilusión de que significarán que Ucrania gane en el campo de batalla, hasta reflexionar sobre las tropas francesas que luchan contra Rusia en Ucrania, inicialmente como "entrenadores" que enseñan a los ucranianos atrapados en la calle cómo hacer burpees, preferiblemente contra un mecanismo de lanzamiento de misiles. Pero luego, cuando se trata de desplazar directamente a más tropas que ni siquiera tienen que fingir que están en la zona de guerra para hacer flexiones y levantamientos muertos... oye, quién sabe. Los franceses no, porque Macron quiere sembrar "ambigüedad estratégica". O como lo llama la gente normal: turbiedad.

No es como si el crash and burn de Macron no disfrutara del beneficio de una pista de aterrizaje masivamente larga con varias rampas de salida. Las protestas francesas de los Chalecos Amarillos que arrancaron en noviembre de 2018 con la decisión de Macron de volver a subir los impuestos sobre el carbono en el combustible de los coches, y duraron meses y meses, hasta los cierres de Covid, deberían haber sido la primera pista de que los franceses no estaban dispuestos a pagar por tonterías ideológicas a costa de su propia capacidad para llegar a fin de mes. Pero entonces él y sus elitistas amigos eurócratas persistieron con los costes cada vez más asfixiantes del cambio climático y las regulaciones que se metían con el precio y la disponibilidad de los alimentos que los franceses ponían en sus platos. Nada radical al respecto, ¿verdad?

A pesar de toda su insistencia en la democracia, el equipo Macron también aprobó leyes impopulares con la cláusula constitucional del artículo 49.3, forzando su aprobación. Y ahora es todo un misterio por qué a los franceses ya no les disuade que Macron califique a la oposición de extrema. ¿Y qué ha hecho respecto a la situación cada vez más extrema de la inmigración y la inseguridad, que los votantes franceses consideran en gran medida vinculadas y uno de los tres temas principales de estas elecciones junto con el poder adquisitivo y la percepción de Francia en el mundo? Está claro que no lo suficiente.  

Así que ahora recurre a soplar un beso a la izquierda, tratándola como la última esperanza para salvar a los votantes de sí mismos y de lo que le siguen diciendo que quieren. Estoy seguro de que cualquier cosa que ordene a los votantes franceses, estarán encantados de obedecer ciegamente. Por dos veces, los franceses han escuchado las exigencias electorales de Macron y le han mandado a paseo. Pero a la tercera va la vencida, ¿no?

Las declaraciones, puntos de vista y opiniones expresadas en esta columna son exclusivamente las del autor y no representan necesariamente las de RT.

原文：
1 Jul, 2024 11:56
HomeWorld News
Why the French chose the ‘radical far right’ over Macron’s establishment

The overconfident president got what was coming when his party suffered a massive defeat in the first round of the national election

Rachel Marsden
By Rachel Marsden, a columnist, political strategist, and host of independently produced talk-shows in French and English.
rachelmarsden.com

Photo top: FILE PHOTO. France's President Emmanuel Macron speaks to the press at the end of the European Council Summit at the EU headquarters in Brussels on June 28, 2024. ©  Ludovic MARIN / AFP

French President Emmanuel Macron figured that he would toss a grenade at the anti-establishment right that beat his team in the European parliamentary elections last month, as Le Monde reported. He apparently figured that even though French voters favored Marine Le Pen’s National Rally party to keep Brussels’ Eurocrats in check, surely they would still find the so-called “far-right” too scary up-close in a national election.

So Macron triggered what might go down as one of the dumbest unforced errors in political history.

Even though an Ipsos survey taken in May indicated that 39% of the French viewed their vote at the EU level solely through the prism of a burning desire to spank Macron, he dissolved parliament and dared them to do it again. Maybe he just really likes spankings? Or else this is one guy who should probably steer clear of the betting tables in Las Vegas. Because the French just grabbed a hold of his grenade with both hands and used it to blow his beret right off his toupee.  

Team Macron didn’t even come in second this time, in the first of two rounds of voting. It came in third, with a projected 20%, behind both anti-establishment parties. The big winner, yet again, was Le Pen’s anti-establishment right National Rally party with about 33%, and the anti-establishment left New Popular Front coalition placed second at an estimated 28%.

Not only did the much vilified “far-right” anti-establishment just win this round of voting, but there’s now even talk of them potentially securing between 260 to 310 seats in the 577-seat National Assembly — which could meet the 289 seats required for a majority government, according to an Elabe polling analysis.

So now with Macron’s establishment party purged, leaving the anti-establishment right and left, the political cards are getting reshuffled for a second-round vote on Sunday, July 7, that’s set to determine the true ideological heart and soul of France.

With this losing bet, Macron has virtually guaranteed himself a final three years of his presidency as a captain adrift legislatively, constantly fighting whatever crew he ultimately ends up with in government. And both sides of the anti-establishment political divide on the right and left are celebrating that.

“This vote inflicted a heavy and undeniable defeat for the president, his candidates, and the so-called presidential majority,” said leftist coalition leader, Jean-Luc Melenchon. But then he called on his party’s candidates currently running in third place heading into the final round to drop out if the National Rally has any chance of winning, even if they meet the threshold of votes (12.5% of registered voters) to continue to the second round.

This would mean that Team Melenchon would effectively be supporting the Macronist establishment candidates. There’s leftist logic for you: It’s awesome that we defeated the establishment, but please vote for it now over our anti-establishment rival.  

If you like that logic, just watch how they apply it to economics if they ever get into power. Two plus two equals… who really cares because you’re the ones paying for it, anyway.

And even though the crooked globalist establishment has just been buried, its spectre of influence is still haunting the French political landscape heading into this final vote. They just don’t take a hint very well.

Already we’re seeing Team Macron, including Macron himself and Prime Minister Gabriel Attal, demanding that French voters choose the National Rally’s opponents in the second round, even if they have to hold their noses and vote left, apparently.

“Tonight’s lesson is that the far right is on the brink of power… Never in our democracy has the National Assembly been at such risk of being dominated by the far-right as it is this evening,” Attal said as the results were coming in. “Not a single vote should go to the National Rally… If we want to live up to the French destiny, it is our moral duty to do everything possible to prevent the worst from happening,” he added.

Did it ever occur to these guys that they and their establishment pals are now seen as the real extremists, and that’s why they keep getting democratically rejected whenever the people get a say?

They’re talking like they think voters are stupid and don’t know a real threat when they see one. But what voters keep clearly conveying, in a second vote in as many months now, is that they are already fighting existential threats, that those are worse than any imaginary ones conjured up by the establishment, and that Team Macron is responsible for that.

French citizens can barely afford to live anymore as a result of radical and extreme misplaced priorities on everything from Ukraine spending and domestically “economicidal” measures under the illusion that they’ll mean Ukraine wins on the battlefield, to musing about French troops fighting Russia in Ukraine — initially as “trainers” teaching Ukrainians nabbed off the street how to do burpees, preferably up against a missile launch firing mechanism. But then when it comes to outright commuting more troops who don’t even have to pretend that they’re in the war zone to do deadlifts and push-ups – hey, who knows. Not the French, because Macron wants to sow “strategic ambiguity.” Or as normal people call it: shadiness.

It’s not like Macron’s crash and burn didn’t enjoy the benefit of a massively long runway with several exit ramps. French Yellow Vest protests that kicked off in November 2018 with Macron’s decision raise carbon taxes again on car fuel, and lasted for months on end, up until the Covid lockdowns, should have been the first clue that the French weren’t willing to pay for ideological nonsense at the expense of their own ability to make ends meet. But then he and his elitist Eurocrat pals persisted with increasingly stifling climate change costs and regulations that messed with the price and availability of the food that the French put on their plates. Nothing radical about that, right?

For all his insistence on democracy, Team Macron also rammed through unpopular laws with the Article 49.3 constitutional clause, forcing their passage. And now it’s just such a big mystery why the French are no longer deterred by Macron’s qualifying the opposition as extreme. And what has he done about the increasingly extreme immigration and insecurity situation, which French voters largely consider to be linked and one of the top three issues in this election alongside purchasing power and the perception of France in the world? Clearly not enough.  

So now he’s resorting to blowing a kiss to the left, treating them like the last hope to save voters from themselves and from what they keep telling him they want. I’m sure whatever he orders French voters to do now, they’ll be only too happy to just blindly obey. Twice now, French voters have listened to Macron’s electoral demands and told him to shove it. But third time’s the charm, right?

The statements, views and opinions expressed in this column are solely those of the author and do not necessarily represent those of RT.